“Quien intenta vivir con mas rapidez, también acaba muriendo mas rápido. La experiencia de la duración, y no el número de vivencias, hace que una vida sea plena. Una sucesión veloz de acontecimientos no da lugar a ninguna duración. La satisfacción y el sentido no se dejan fundamentar en un cuerpo teórico. Una vida a toda velocidad, sin perdurabilidad ni lentitud, marcada por vivencias fugaces, repentinas y pasajeras, por mas alta que sea la cuota de vivencias, seguirá siendo una vida corta.»
Byung-Chul Han. «El aroma del tiempo»