Aún hay tiempo para visitar la imprescindible exposición de Ingres en el Museo del Prado, ya que estará hasta el día 27 de marzo. La obra de este autor francés (1780-1867) es un buen ejemplo de lo que el arte encierra: razón y misterio. Apenas será necesaria información a la hora de contemplar sus trabajos, pues bastarán dos o tres cuadros para mover la sensibilidad del espectador. Tras el sutil modelado se hace presente la belleza de la pintura, tan difícil a veces de explicar, y la observación de ciertas telas desvelará el peso de su influencia hasta el siglo XX.